La gran carga (heredada) del Gobierno

Un nuevo comunicado de CFK sobre el tema deuda. El presidente prometió "pulso firme" y Kristalina Georgieva le puso paños fríos a la intención del Gobierno de cerrar el acuerdo antes de fin de año.

El fin de semana pasado Cristina Fernández publicó otro comunicado en el que hizo referencia a las negociaciones con el Fondo Monetario Internacional que lleva adelante el Gobierno nacional. "La lapicera la tiene el presidente", marcó la titular del Senado y fue el mismo Alberto Fernández en el acto de la UIA el que aseguró que tendrá el "pulso firme" a la hora de sellar el acuerdo con el organismo de crédito. Mientras que la actividad económica sigue dando signos de recuperación en un escenario convulsionado por las subas de precios de los productos de consumo masivo, la deuda sigue siendo la gran carga (heredada) para la actual conducción: "La madre de todas las batallas". 

La advertencia de Cristina Kirchner fue clara: "Lo que se arregle con el organismo puede llegar a constituir el más auténtico y verdadero 'cepo' del que se tenga memoria para desarrollar al país". Fue la primera manifestación pública de la expresidenta luego de las elecciones generales del pasado 14 de noviembre, y otra vez sus párrafos calaron hondo en el espectro oficialista y en el escenario político en general. Después de las turbulencias y la crisis interna que terminaron de estallar por la derrota en las PASO, en la coalición gobernante se respira una tensa calma a sabiendas que la segunda parte del mandato no está exento de encrucijadas varias y del gran tema de la deuda como principal escollo en su camino hacia la reactivación y una eventual triunfo en 2023.

En otro tramo del escrito, la titular del Senado destacó, nuevamente, la autoridad presidencial. "Nadie debe engañarse respecto de quién gobierna", señaló CFK  y rememoró que "fue el propio Alberto Fernández, el pasado 9 de julio, quien afirmó que jamás deberá esperarse de él la firma de algo que arruine la vida del pueblo argentino, porque antes que hacer eso preferirá irse a su casa". Otro claro mensaje hacia dentro, pero también hacia fuera. No obstante, esta frase tuvo una interpretacióm ambigua por los grandes medios, que infirieron que la vicepresidenta le "sacó el cuerpo" al tema de la deuda y dejó en soledad al presidente. Si hubiese dicho algo en sentido contrario la hubiesen acusado de dominar a su gusto y placer al jefe de Estado. La lógica perversa de siempre. 

Esta semana, Alberto Fernández habló sobre las negociaciones frente a los industriales de la UIA. "Afrontaremos las deudas que otros generaron, pero ese acuerdo no será a costa del desarrollo del país ni en base a ningún programa de ajuste", prometió el presidente. Luego, trascendió que le pidió al organismo bilateral que revise los términos del préstamo otorgado al Gobierno de Cambiemos, algo que todavía no fue confirmado pero que las autoridades del FMI analizan hacer antes de cerrar el acuerdo con Argentina. "Por el crédito se desembolsaron 44.000 millones de dólares que se mal-utilizaron en pagar deuda insostenible y en financiar salida de capitales. Eso nos va a ayudar a terminar de entendernos. Es un paso necesario en este camino", apuntó el mandatario.

"Lo que buscamos es un acuerdo para el desarrollo sustentable en donde tenemos una programación plurianual, en donde le decimos al FMI: 'Presento esto y es lo que voy a hacer para que la Argentina se recupere, genere trabajo y la inflación vaya bajando, que es algo fundamental para el buen funcionamiento de la economía. Y para que la economía agregue más valor. Con eso permitime refinanciar; que no te tenga que pagar ahora'", aseguró Martín Guzman en su exposición frente a la cúpula de la CGT. El ministro de Economía logró el respaldo de la central obrera. El oficialismo envió una señal de "real integración" a la dirigencia sindical en su proyecto. Los cegetistas recibieron con beneplático el gesto y afirmaron que "acompañarán" al Frente de Todos. 

En tanto, este sábado una misión Argentina arribó a Washington Estados Unidos para reunirse con representantes del Fondo Monetario Internacional para avanzar con la refinanciación. La comitiva está encabezada por Sergio Chodos, representante de Argentina y el Cono Sur en el directorio del FMI. En la previa al inicio de las nuevas rondas de negociaciones, Kristalina Georgieva le puso paños fríos al anhelo del Gobierno nacional de sellar el acuerdo antes de fin de año. "Todavía queda mucho por hacer", dijo la directora gerente del organismo. 

El Frente de Todos se juega gran parte de las proyecciones de la segunda parte de su mandato en las condiciones en la que se inscriba el tan ansiado acuerdo. Algo que parece por demás injusto a su proyecto político y a sus intenciones de gestionar el país, como dijo CFK en varias oportunidades el Gobierno tuvo que soportar dos pandemias: el coronavirus y la herencia del macrismo. Y como si esto fuera poco tiene que escuchar que quien decidió tomar el endeudamiento (sin tratarlo en el Congreso) diga que si el hubiese ganado las elecciones presidenciales en 2019, lo hubiera resuelto en 5 minutos....

Diarios Argentinos