Grant Morrison: Llenando de magia la realidad

OPINION. El mundo del cómic considera a Grant Morrison uno de los mejores guionistas de la historia, morador del Olimpo donde habitan pocos genios de ese tamaño


El mundo del cómic considera a Grant Morrison uno de los mejores guionistas de la historia, morador del Olimpo donde habitan pocos genios de ese tamaño. Emergente de la ola británica que tomó por asalto el mercado norteamericano a principios de los 80, talento salvaje y controvertido debido a su narrativa no lineal, Grant es uno de mis favoritos.


Un chamán del siglo XXI, adelantado a nuestra época y según él una “víctima de abducción extraterrestre”, este gran autor británico cambió la vida de muchos lectores con obras corrosivas, disruptivas y no convencionales, sacudiendo el tablero en muchas ocasiones.


Nacido en Glasgow, Escocia y criado en una familia muy política, compuesta por activistas en tiempos post- Segunda Guerra Mundial, Grant Morrison creció leyendo todo tipo de historietas de la Silver Age en la que destacan personajes como Miracleman o Superman, quienes actuaban como un  cable a tierra y hacían olvidar al niño de su temor al constante estado de amenaza bélica latente que afectaba esa época, haciéndolo pensar que sus personajes favoritos podrían lidiar con esos problemas que aquejaban a Escocia y a gran parte de Europa en aquellos años.


Siendo adolescente fue miembro de la banda musical “The Mixers” y en paralelo fue pavimentando su camino como gran guionista en el ámbito local de historietas, logrando que grandes editoriales presten atención en sus escritos.


Saltó finalmente a la fama cuando en los años 80 fue llamado por Karen Berger (fundadora y Directora Ejecutiva de lo que pocos años después sería la línea Vértigo de DC Comics, una en donde se contaban historias más adultas) para revitalizar un personaje que casualmente leía de niño: Animal Man.


Vértigo Comics fue la casa en donde los autores gozaron de la libertad requerida para crear un sin fín de grandes obras, alejadas de la estética mainstream en la línea madre en la editorial.


Volviendo a “Animal Man”, el por aquel entonces joven e introvertido escocés tomó las riendas del personaje, olvidado y ridiculizado para crear una de las mejores etapas de este personaje.


Sin entrar en detalles, Morrison juega con el metalenguaje, el mismo Animal Man cuestiona el medio (la historieta) y hasta tiene una conversación con el mismo Grant Morrison, que es un personaje más (encarnando un ser omnisciente dentro de la obra)  ya casi llegando al final de la historia. El activismo ecológico es otro gran punto fuerte en el paso del escocés por las aventuras de Buddy Baker.


Por estos tiempos, entra en una disputa y rivalidad con Alan Moore (“Watchmen”: “Miracleman” o “From Hell”), quien previamente le había negado a Morrison continuar con las aventuras de “Miracleman” (personaje que Moore tenía a cargo y había dejado para continuar con otros proyectos).


La diferencia entre los dos guionistas es la siguiente: Alan Moore escribe a los superhéroes como si estuviesen en el mundo real, llenando de sangre y mugre de este plano real a los personajes de cómics haciéndolos más frágiles y fútiles. Por su parte, Grant Morrison elabora sus textos como si él mismo formara parte del mundo de los superhéroes. Propone que nuestra existencia está poblada de magia, supone la presencia de lo mágico, fantástico y onírico como parte de la vida, siempre jugando con el concepto de metalenguaje y Multiverso.


Los últimos conceptos nombrados anteriormente acompañan a Morrison desde su etapa en Animal Man. 

Posteriormente se haría cargo de “Doom Patrol”, otros personajes totalmente olvidados y un hazme reír en la editorial DC Comics. En su etapa el dadaísmo, la bohemia, las locas teorías científicas, vanguardias artísticas y la rotura de la cuarta pared son claves para las aventuras de estos “héroes que no quieren ser héroes”.


Vale la mención de “Flex Mentallo”, una obra y personaje devenido de “ Doom Patrol”, en donde (a raíz de un héroe con la apariencia de Charles Atlas) escribe una especie de autobiografía y un homenaje a su padre, así como también establece que la realidad y la ficción son una. También apreciamos que el concepto de lo metaficcional está en altos niveles. Acompañado en el dibujo por Frank Quitely, el artista que a mi parecer es quien mejor supo entender al autor y fue clave a lo largo de su carrera.


La novela gráfica que lo llevaría de forma definitiva al estrellato y lo salvaría económicamente de por vida fue “Arkham Asylum: A Serious House on Serious Earth ”, un drama entre psicológico y onírico (el autor dijo en una entrevista que la trama es un mero sueño de Bruce Wayne cuando llega de vigilar Gotham City al amanecer) que eleva el guión hasta la categoría de obra maestra suplementado por el arte supremo aportado por Dave McKean.
Más tarde se encargaría de las aventuras de “Justice League”, en donde ya con total descaro artístico explora el concepto del Multiverso, otros mundos, planos  de Tierras y homónimos de los miembros de la Liga.


Morrison es un experto en las diferentes teorías del Multiverso, dedicando años a la búsqueda obsesiva de teorías científicas y menciones literarias de este fenómeno, por lo tanto ha podido plasmar cada una de ellas en sus guiones de forma magistral.


Trabajos como “El Asco”; “Crisis Final” y “Multiverso” (aquí el escocés exprime el término al máximo) son obras fundamentales, escritas de manera excelente aunque también polémicas, lo que provocaron  que potenciales lectores no entendieran el punto del autor, dejando de lado sus trabajos y optando por opciones literarias más al paso, quizás prejuzgando las brillantes obras de Grant Morrison.


“Los Invisibles” es la obra más personal de Morrison, en donde etapas de su vida y experiencias son personajes y tramas  en esta loca narrativa.


“All Star Superman”, una obra muy interesante dentro del “mainstream”, es  quizás su obra más íntima luego de “Flex Mentallo” y en la cual escribe una verdadera declaración de amor para el héroe con la S  de esperanza en el pecho.


El autor también  tuvo pasos muy buenos en Marvel, aunque no tan destacados como en DC.  “4F 1234”; “Skrull Kill Krew” (junto a Mark Millar, autor de “Kick Ass” , quien abusó de la confianza de Grant apropiándose de ideas que este le había contado); “Marvel Boy” y la mítica, apasionante y vertiginosa “New X-Men” son algunas de las huellas que dejó en “La Casa de Las Ideas”.


En DC tuvo algunos trabajos menores pero no por ello de menor calidad: un breve paso por “Hellblazer” y "Swamp Thing"; “Batman INC” o “Batman R.I.P”, “Flash” o actualmente “Green Lantern” son algunos de ellos.
De la famosa línea Vértigo, “Joe El Bárbaro” o “WE3” son otras de los grandes trabajos del nacido en Glasgow.
¿Qué es lo que más me gusta de Grant Morrison?...


El escocés adapta a los personajes a su manera y juega con ellos aportando una visión crítica, sin miedo de contar sus ideas, las cuales reinventan la visión de la magia aunque en ocasiones peque de excesivo. El juego literario metaficcional va más allá de todo, haciendo que sus escritos transmitan la intimidad de la obra de manera que impacte de igual manera en el autor tanto como en el lector.


Sin dudas Grant Morrison no es para cualquiera, en mi caso sus obras me hicieron amar lo extraño, sentir placer al conectar con sus escritos, que expresan sus vivencias de una manera alocada, una manera de entrar en el fantástico mundo que el ganador de tres premios Eisner tiene para contar.


"Todos hacen magia todo el tiempo de diferentes maneras.
Vida + Significado = Magia"
Grant Morrison.


Sobre el autor: 24 años de edad. Oriundo de Buenos Aires. Lo encuentran reseñando cómics como @FestivoC  y @festivo_comics en Twitter e Instagram, respectivamente. Un multimillonario que se viste de murciélago por las noches le cambió la vida...

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