El Papa volvió a condenar los abusos sexuales de sacerdotes

Francisco escribió el prólogo a un libro de una víctima de pedofilia en la diócesis alemana de Frigurbo, titulado “Padre mío, te perdono”. Es una “mostruosidad absoluta”, dijo el Sumo Pontífice.

El Papa volvió a condenar los abusos sexuales de sacerdotes. Esta vez lo hizo en el prólogo que escribió para el libro “Padre mío, te perdono” en el que Daniel Pittet, una víctima de abuso en la diócesis alemana de Friburgo, narra la pesadilla que tuvo que vivir.

En el libro, publicado en Italia, Francisco calificó los abusos por parte de sacerdotes de “monstruosidad absoluta”.

"¿Cómo puede un sacerdote, al servicio de Cristo y de su Iglesia, llegar a causar tanto mal? ¿Cómo puede haber consagrado su vida para conducir a los niños a Dios y terminar en cambio devorándolos en lo que he llamado 'un sacrificio diabólico', que destruye tanto a la víctima como a la vida de la Iglesia?", se preguntó el Sumo Pontífice.

En el escrito, el Papa apuntó que "algunas víctimas llegaron a suicidarse", por lo que aseguró: "Estos muertos pesan en mi corazón, en mi conciencia y en la de toda la Iglesia".

Francisco conoció a Pittet hace dos años en el Vaticano. En el texto, agradeció al escritor por su testimonio que ayudó a "derribar los muros de silencio que sofocaban los escándalos y los sufrimientos y que muestra una terrible zona de sombra en la vida de la Iglesia", y agregó: “A sus familias ofrezco mi sentimiento de amor y de dolor y, humildemente, pido perdón. Se trata de una monstruosidad absoluta, de un pecado horrendo, radicalmente contrario a todo lo que Cristo enseña".

Según el Papa, estos testimonios "abren el camino a una justa reparación y a la gracia de la reconciliación, y ayudan a los pedófilos a tomar conciencia de las terribles consecuencias de sus actos".




Diarios Argentinos