Docentes, médicos y judiciales encabezan otra semana de reclamos contra Vidal

El Gobierno se niega a cerrar la paritaria por decreto y crece la incertidumbre entre los trabajadores. Hasta el momento, la mejor oferta la recibieron los docentes y equivale a la mitad de la inflación proyectada para todo el año por fuentes oficiales.

Enfocado en contener la situación social en los distritos calientes del courbano para lograr evitar nuevos estallidos que pudieron contagiarse al resto de la provincia, el Gobierno de María Eugenia Vidal enfrenta otra semana de tensiones con los gremios de trabajadores estatales de las áreas de Salud, Educación y Justicia, que han decidido profundizar los planes de lucha atento a la falta de respuestas de las autoridades.

La punta de lanza del conflicto siguen siendo los docentes por la representatividad que tienen frente a las familias de los más de 4 millones de alumnos que tiene la Provincia en todos los niveles y que ya llevan más de 25 días de paro en lo que va del año, por lo que se analizan mecanismos para recuperar las clases y no se descarta ampliar el ciclo lectivo casi hasta las fiestas de fin de año.

Sin un nuevo llamado en el horizonte, los docentes, con Roberto Baradel a la cabeza, lanzaron un nuevo paro por 48 horas y se preparan para enfrentar un escenario de pérdida de por lo menos 10 puntos de poder adquisitivo, lo que llevaría la merma a casi un 15% desde que comenzó el gobierno de Cambiemos en la Provincia y sin que desde el Ministerio de Economía admitan que esa es la realidad de los maestros.

El otro sector que arrastra un conflicto de larga data es el que nuclea a los médicos del sistema público de Salud bonaerense. Como con los docentes, no solo por la falta de respuestas a la cuestión salarial, sino también por la grave situación de infraestructura, equipamiento y mantenimiento que afecta a los hospitales y salas de atención primaria distribuidas en toda la provincia.  

Por eso, desde CICOP lanzaron una convocatoria para la unificación de las luchas sindicales en la Provincia porque “el Gobierno tiene la decisión política de no invertir en lo público, se puede aplicar en la salud, en la educación y a cualquier política pública, sobre todo en los sectores que no han cerrado paritarias”, según explicó Marta Márquez, la presidenta de esa asociación de profesionales de la salud.

El cuadro lo completan los judiciales, que tampoco han logrado una negociación favorable para este año y, como los médicos, han sufrido, además, cierto "ninguneo" por parte de las autoridades, ya que ni siquiera habían sido convocados a una reunión hasta que la Suprema Corte de Justicia provincial manifestó preocupación por la falta de acuerdos. Recién en ese momento, desde el Ejecutivo se intentó cerrar una negociación que, de todas maneras, tuvo el mismo final que con el resto de los sectores que también están desarrollando un plan de lucha.

Mientras tanto, desde el Gobierno provincial insisten en que no están en condiciones de realizar ofertas por encima de los 20 puntos, lo que equivale a la mitad de la inflación proyectada por el Ministerio de Hacienda a nivel nacional. La propuesta que se acerca informalmente a los gremios es la de mantener abierta la paritaria y evaluar mes a mes cuál es el aumento posible, en una negociación que no tiene antecedentes en la Provincia de Buenos Aires. 

Por el momento, es el único mecanismo que Vidal estaría dispuesta a implementar para favorecer una mejora en los salarios de modo que no queden tan retrasados respecto de la inflación, aunque por el momento los dirigentes afirman que de ninguna manera van a firmar un acuerdo de esas características.

La Matanza