Córdoba: hallaron muerta a Abril Sosa y detuvieron a un sospechoso

El cuerpo de la nena de 5 años, desaparecida desde el sábado, fue encontrado en un terreno baldío. “Me ayudó a buscar a mi hija, es una mente enferma", dijo el padre de la víctima sobre el único detenido.

El cadáver de Abril Sosa, la nena de 5 años que estaba desaparecida desde el sábado 13 de enero en la capital cordobesa, fue encontrado anoche en un terreno baldío de la zona norte de la ciudad.

Fuentes policiales y judiciales informaron a Télam que por el hecho detuvieron a un sospechoso. El hombre, de 35 años, fue identificado como Daniel Ludueña.

La fiscal de la causa, Claudia Palacios, afirmó que el sospechoso "es un vecino" de la zona donde vivía Abril.

Palacios aclaró que por hasta el momento se manejan dos hipótesis: la de un ajuste de cuentas narco ─dado que el padre de la nena dijo que en alguna ocasión habían vendido drogas─ y la del ataque de un pedófilo. "Puede que haya sido un pedófilo, estamos entre esas dos hipótesis", dijo la fiscal. Además, informó que fue el sospechoso quien proporcionó "la pista clave para llegar al lugar" en el que se encontró el cuerpo.

Según la funcionaria judicial, Ludueña tiene antecedentes por "delitos contra la integridad sexual". "No se resistió al momento de la detención", confirmó.

En diálogo con radio Mitre Córdoba, Cristian Sosa, el papá de Abril, contó: "Me ayudó a buscar a mi hija. Es una mente muy enferma. Palmearte la espalda y decirte 'ya va a aparecer'". 

"Nos dijeron que había abusado de su sobrino y lo había matado, que abusó de su hermana también, pero en ese momento no sabíamos nada", agregó.

A la vez, el hombre negó que el asesinato de la nena haya formado parte de un ajuste de cuentas ─hipótesis que la fiscal del caso había mencionado en el principio de la búsqueda de la nena─. "No ha sido ningún ajuste de cuentas", aseguró Sosa.

"Él venía a casa, me ayudó a pintar mi casa, compartíamos una cena, un almuerzo, no sé qué mente tan enferma podía tener este hombre para hacer semejante cosa", contó. 

"Alquilaba a la vuelta y al lado, donde encontraron el cuerpo de mi hija. Le dijimos a la Policía quiénes podían ser. Pero nos pegaban a nosotros, pensaban que nosotros teníamos que ver. Ahora no aparece ninguno. No recuerdo el nombre del oficial que me pegó", denunció Sosa.

Abril fue vista con vida por última vez la noche del 13 de enero, cuando salió de su casa, situada en República y Tissera, en el barrio general Bustos de la capital cordobesa, para ir a jugar con otros chicos de la cuadra.

Al no regresar, su familia denunció su desaparición cerca de la medianoche.

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